**Titular: El Mundo en Alerta: Reacciones Globales al Ataque de EE. UU. contra Irán**
El reciente ataque de Estados Unidos a instalaciones nucleares en Irán ha sacudido los cimientos de la política internacional, generando reacciones contundentes de líderes de todo el mundo. Este acto, que marca una unión oficial entre Washington e Israel en su lucha contra la República Islámica, ha desatado una ola de condenas y llamados a la paz.
El presidente iraní, Masud Pesquiá, no se contuvo al calificar el ataque como una agresión inaceptable, acusando a EE. UU. de ser el verdadero instigador detrás de la operación militar israelí. Su ministro de Relaciones Exteriores, Abas Arachi, advirtió que estas acciones tendrán “consecuencias eternas”, reflejando la gravedad de la situación.
Desde Tel Aviv, el primer ministro Benjamin Netanyahu celebró el ataque como un “punto de inflexión histórico”, afirmando que “primero viene la fuerza, después viene la paz”. Sin embargo, esta perspectiva fue rápidamente desafiada por el secretario general de la ONU, António Guterres, quien calificó la escalada como “peligrosa” y una amenaza directa para la paz mundial.
Las reacciones no se hicieron esperar. Rusia criticó los bombardeos, considerándolos irresponsables y en violación del derecho internacional. China, por su parte, instó a un cese al fuego inmediato y condenó firmemente la acción de EE. UU. En Europa, líderes como el presidente francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Friedrich Netz llamaron a la diplomacia y a un retorno a la mesa de negociaciones.
Mientras tanto, el Papa León XIV, desde el Vaticano, hizo un llamado a la humanidad para que clame por la paz en un momento tan crítico. Con el mundo al borde de un nuevo conflicto, la pregunta que queda es: ¿podrá la diplomacia prevalecer sobre la fuerza en un escenario tan volátil? La comunidad internacional observa con atención, esperando que la razón y el diálogo prevalezcan sobre la violencia.