**Título: ¡Alerta Arancelaria! Trump Amenaza a Gigantes como Apple y Mattel con Nuevos Impuestos**

En un giro impactante del escenario económico, el presidente Donald Trump ha puesto en la mira a dos de las compañías más emblemáticas de Estados Unidos: Apple y Mattel. Según informes de CNN, Trump ha expresado su intención de imponer aranceles significativos a estos gigantes del sector tecnológico y minorista, lo que podría desatar una tormenta en el mercado y provocar reacciones en cadena en la industria.

Esta medida, que no solo apunta a los competidores internacionales como la Unión Europea y China, sino también a empresas estadounidenses de renombre, ha sido interpretada por expertos como una táctica para presionar a las compañías a que fabriquen en territorio nacional. Las exigencias de Trump son claras: quiere que tanto Apple como Mattel produzcan el 100% de sus productos en Estados Unidos, un desafío que muchos consideran impracticable y que podría generar conflictos legales.

Recientemente, el Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos cuestionó la autoridad de Trump para imponer aranceles de forma unilateral, lo que plantea dudas sobre la viabilidad de sus amenazas. A pesar de esta situación legal, Trump parece decidido a utilizar su poder para forzar cambios en las políticas de fabricación de estas empresas, algo que podría desencadenar repercusiones significativas en el mercado.

Mientras las acciones de Apple y Mattel continúan fluctuando, el ambiente es de incertidumbre. A pesar de la amenaza de aranceles, sus cotizaciones se mantienen relativamente estables, lo que sugiere que el mercado aún no ha reaccionado de manera contundente. Sin embargo, la tensión está palpable y el futuro de estas empresas podría depender de cómo se desarrollen estos acontecimientos en las próximas semanas.

Esta amenaza de aranceles es solo el último capítulo en la saga de Trump con el comercio internacional y su enfoque agresivo hacia la economía. El mundo empresarial observa con atención, preguntándose cuáles serán las repercusiones de este enfrentamiento entre el presidente y dos de los actores más grandes de la economía estadounidense.