María Elena Bergoglio, la única hermana viva del Papa Francisco, ha decidido romper su silencio y ofrecer una visión íntima y sorprendente sobre su hermano, el pontífice. En una reciente entrevista, María Elena compartió detalles sobre la vida personal de Jorge Mario Bergoglio, revelando aspectos que han dejado atónitos incluso a sus seguidores más fervorosos. La hermana del Papa habló sobre la infancia de Jorge en Buenos Aires, destacando su fuerte sentido de justicia y compasión desde joven, así como su cercanía con la familia.

María Elena también abordó las tensiones internas que enfrenta la Iglesia Católica y las críticas que ha recibido Francisco por sus posiciones progresistas, asegurando que su compromiso con los pobres y marginados es genuino y no una estrategia. “Siempre supe que Jorge desafiaba normas y buscaba cambios cuando veía injusticias”, afirmó. Además, expresó su preocupación por la salud de su hermano, que ha sido motivo de especulación en los últimos años. Según sus declaraciones, el Papa ha enfrentado serios problemas de salud, incluyendo una cirugía intestinal en 2021 y dificultades de movilidad, lo que ha llevado a algunos a preguntarse si considerará la renuncia.

El vínculo entre María Elena y Francisco es notablemente cercano; ambos mantienen una comunicación constante, donde ella no duda en compartir su opinión sobre las decisiones papales. Esta relación se ha mantenido fuerte a pesar de las adversidades y la distancia física impuesta por el papado. María Elena se ha convertido en una de las pocas personas que pueden hablar con Francisco sin formalidades, recordando al mundo que, detrás del título de Papa, hay un hermano que sigue siendo la misma persona que creció en un hogar lleno de fe y valores.

Las revelaciones de María Elena no solo ofrecen una visión más humana del Papa Francisco, sino que también resaltan los desafíos que enfrenta la Iglesia en un mundo cambiante. Su testimonio subraya la lucha del pontífice por una Iglesia más inclusiva y su constante esfuerzo por mantenerse fiel a sus principios, a pesar de las críticas.