A sus 66 años, Dey Row, la exesposa de Michael Jackson y madre de sus dos primeros hijos, ha decidido romper su silencio, dejando al mundo completamente conmocionado. En un giro inesperado, Row ha compartido impactantes revelaciones sobre su relación con el rey del pop, sumergiéndonos en un torbellino de emociones, secretos y verdades ocultas durante más de dos décadas.
Después de años de silencio, Dey Row ha hablado sobre su matrimonio con Jackson, que comenzó en 1996 y terminó en un divorcio tumultuoso solo tres años después. En sus declaraciones, Row desentraña la complejidad de su vínculo, que muchos han cuestionado como meramente transaccional. En su relato, ella admite que su relación con Jackson, aunque marcada por momentos de amor, también estuvo rodeada de dolor y confusión, especialmente en lo que respecta a la crianza de sus hijos, Prince y Paris.
Row ha revelado que, a pesar de las especulaciones, nunca hubo una relación 𝓈ℯ𝓍ual entre ellos, lo que ha generado un estallido de reacciones en redes sociales y medios de comunicación. “Me embarazaron como se insemina a una yegua”, confesó, dejando claro que su papel fue más el de una madre subrogada que de una esposa convencional.
La tensión aumentó tras la muerte de Jackson en 2009, cuando las dudas sobre la paternidad de sus hijos comenzaron a circular. Row ha enfrentado rumores dolorosos y ha luchado por su reputación y la verdad sobre su maternidad, defendiendo su papel como madre biológica. Sin embargo, el impacto de sus declaraciones ha reavivado el interés en la vida del artista y su legado, y la historia de Row es ahora un recordatorio de la complejidad de las relaciones humanas.
Con su revelación, Dey Row no solo está rompiendo su silencio, sino que también está abriendo un capítulo desgarrador en la narrativa de Michael Jackson, un ícono que sigue siendo objeto de fascinación y controversia. La historia continúa desarrollándose y el mundo observa con atención.